La empresa quiere convertir algunos de sus consumidores que no comparten la misma ubicación en clientes que pagan.
Ahora, según varios medios estadounidenses se han revelado algunos de los detalles del plan que tiene para acabar con las contraseñas compartidas, el cual comenzará a principios de 2023.
Estados Unidos sería la primer región en ver el cambio. Como criterio para decidir quién deberá pagar se revisarán las direcciones IP, los identificadores de los dispositivos, así como la actividad de la cuenta, presionando "gradualmente" para evitar el intercambio de contraseñas.
Hasta ahora, no se tiene definido cuánto tendrán que pagar quienes comparten contraseña para habilitar el que personas fuera de sus casas también tengan acceso, aunque el precio sería menor al de su plan con anuncios.
Vía: Agencias.