La menor describió que salió junto a su abuela para dar un paseo y decidieron llegar a la playa. Todo estaba tranquilo, cuando de pronto sintió que algo grande estaba debajo de su cuerpo.
Su abuela se dio cuenta de lo que pasaba cuando vio a su nieta correr hacia ella con sus piernas llenas de sangre. “Vi toda la sangre y fui a buscar a un salvavidas", dijo.
La menor tuvo que ser trasladada en helicóptero hasta el hospital, donde los médicos señalaron que la niña estaba tranquila y su pie derecho estaba totalmente cubierto de arena.
“Algo me mordió, parecía bastante grande y era gris. Me dolía, así que pensé, patéalo. Traté de patearlo, quitar mi pierna y finalmente la soltó”, confesó.
La niña recibió 100 puntos, en una cirugía que tardó varias horas para poder reconstruirle el pie.
Vía: Plano Informativo.