Esa es la pesadilla por la que ha pasado Lindsy Doan, una madre que perdió de vista a su hijo de 5 años llamado Kyle, luego de que fuera arrastrado por las inundaciones tormentosas que afectaron a California (Estados Unidos).
“Mamá, todo está bien. Solo mantén la calma”, fue lo último que dijo el pequeño antes de separarse de su madre debido a la catástrofe. De acuerdo al medio estadounidense, Lindsy se encontraba con él en el auto de camino a la escuela por Paso Robles cuando perdió el control en una corriente de agua, así que salió del vehículo y se abrazó a un árbol para liberarse junto a su hijo.
“Ayer, llegué al punto en que creo que se me acabaron las lágrimas. Ya no sé qué esperar. Quiero decir, he tratado de hacer una búsqueda en Google: ¿Cuánto tiempo puede un niño no comer? ¿Cuánto tiempo puede estar con la ropa mojada? Estamos preocupados porque yo no sé si podrán encontrarlo“, comentó la mamá a Associated Press.
Información: RN Noticias. // Vía: Plano Informativo.