BANNER

PELIGRA EN EU PASTILLA ABORTIVA.

El futuro de una píldora utilizada en Estados Unidos por medio millón de mujeres cada año para interrumpir sus embarazos está en juego en la sureña entidad de Texas ante un juez ultraconservador, después de que opositores al aborto presentaran una demanda para prohibir la pastilla en todo el país al alegar irregularidades en su aprobación.

En una audiencia de más de cuatro horas, el magistrado Matthew Kacsmaryk, quien fue miembro de un bufete de abogados cristiano previo a ser designado por el ex Presidente Donald Trump, se mostró ayer abierto al argumento de que el medicamento abortivo (mifepristona) no fue investigado adecuadamente por reguladores, por lo que podría ser inseguro.

El juez federal de distrito presionó durante la sesión a los abogados del Gobierno sobre la seguridad y el proceso de aprobación de la píldora, que ha estado en el mercado estadounidense durante más de dos décadas.

Si bien el grupo antiaborto que impugnó la pastilla reconoció que no hay precedentes de que un tribunal ordene la suspensión de un medicamento avalado hace mucho tiempo, el magistrado cuestionó si la mifepristona cumplió con el riguroso estándar necesario para ser prescrita a pacientes en Estados Unidos.

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) y las principales organizaciones de salud se oponen fuertemente a la demanda, presentada en noviembre en Amarillo, Texas. Defienden que fueron necesarios más de cuatro años para que la píldora abortiva obtuviera la aprobación de la agencia en el 2000.

Kacsmaryk, quien en el pasado criticó el fallo de Roe vs. Wade que protegía el derecho al aborto, dijo que emitirá su fallo lo antes posible.

Es probable que su decisión sea apelada ante la conservadora Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de los Estados Unidos y el caso eventualmente podría llegar a la Suprema Corte. Si Kacsmaryk revoca la aprobación de la mifepristona, podría restringir el acceso a nivel nacional. Tal acción sería un desafío sin precedentes para la FDA, que aprobó el medicamento en combinación con una segunda píldora, el misoprostol, como un método seguro y eficaz para interrumpir un embarazo.

Eso sería "nada menos que catastrófico", dijo un grupo de 22 estados liderados por demócratas en documentos judiciales presentados en el caso. Otro grupo de 22 estados republicanos llevó escritos apoyando la revocación. Argumentan que la capacidad de pedir píldoras por correo socava sus leyes que prohíben el aborto.

La interrupción del embarazo con medicamentos representa más de la mitad de todos los abortos en Estados Unidos.

El caso en Texas también ha generado preocupaciones sobre la selección de jueces, debido a los litigantes que buscan presentar demandas ante magistrados que consideran simpatizantes de su causa.

Información: Agencia Reforma. // Vía: Plano Informativo.