El Senado de Australia aprobó una ley histórica que prohibirá el acceso a las redes sociales para menores de 16 años, imponiendo multas de hasta 49.5 millones de dólares australianos a las plataformas que no cumplan.
La normativa, que entrará en vigor en un año, fue respaldada por 34 votos a favor y 19 en contra. Busca proteger a los jóvenes del acoso y los riesgos para la salud mental derivados del uso de redes sociales.