Este decreto elimina de la legislación capitalina el "respeto a la propiedad privada" como principio rector.
Con esta reforma, se recupera en el ámbito local, las nociones de la propiedad originaria de la Nación, así como el derecho de la Nación para transmitir el dominio de la propiedad a los particulares y para imponer a la propiedad privada, las modalidades que dicte el interés público.
Vía: Agencias.